El paro del 11 y 12 de julio que parecía ser solo un paro nacional agrario según los convocantes pero con la intervención de todas las fuerzas sociales, devino en un paro general, lo que ha hecho ser contundente a lo largo y ancho del país, en el campo y la ciudad, la población ha rechazado al fujialanismo. Una convulsión social acumulados por remecidas que empezaron en el norte, seguida por centro y oriente y continuada en sur, que se concretiza el 11 y 12 de julio. Una fecha consolidada y antecedida por la huelga magisterial iniciada el 18 de junio en centro y sur del país y asumida recién por el SUTEP oficial el 5 de julio.
El resultado, más de 20 muertos (como resultado de la represión directa e indirecta), centenares de detenidos de manera arbitraria y otra cantidad de heridos, una represión indiscriminada de las fuerzas alanistas contra todo el pueblo peruano, que tras 11 meses de gestión autoritaria y show mediático y campañas sicosociales, le supo decir ¡Basta! al continuismo neoliberal.
Por otro lado se ha inaugurado un régimen fascista dictatorial (dirán acaso los conocedores de teoría política que no es dictadura, sin entender que la dictadura de nuestros tiempos ya no es la repetición de las viejas dictaduras pero tiene la misma esencia: defender un orden social de opresión oligárquico) por cuanto cumple todos los requisitos: régimen autoritario, control absoluto de los medios de comunicación o alineación con el régimen fascista (quienes en sus noticieros y titulares rinden culto a la represión y los celebran); control sicosocial de la población, campañas contra la oposición y persecución, criminalizacion de toda protesta popular (categorización de terrorismo y delincuentes) y procesos sumarios que se han empezado en forma masiva contra los maestros huelguistas, finalmente gobierna con decretos leyes de urgencia y la negativa petulante de no negociar con quienes piden dialogo y se manda a las fuerzas armadas y policiales a su represión total con muertos heridos.
Hechos contundentes que muestras su esencia fascista son los hechos ocurridos del 5, 6, 11, 12, 13 y 14 de julio y los días siguientes como Andahuaylas y Arequipa, una represión violenta sin limites (recuérdese la marcha de los 4 suyos), pero también en su arrogancia muestra su debilidad y enfrentar pueblo contra pueblo, como lo de Trujillo en la mañana del viernes 13, movilización de “padres de familia” apristas (uso del nombre de APAFAs) contra los docentes, mítines mediáticos –, él y su pandilla si pueden hacer mítines sin permiso a su favor pero cuando es contra suya se le detiene, se les persigue, se le lanza bombas ¿no es un régimen fascista acaso?–.
Por otro lado, es a todas luces, que el movimiento popular esta en ascenso mientras el alanismo en declive, por ello le es necesario la mayor fascistizacion del estado peruano que conducen a la dictadura, no obstante empieza la cuenta regresiva de su inevitable derrota, pues los hechos muestra palmariamente que el pueblo no esperara el 2011 ni otros 4 años por lo que el régimen fascista de García Pérez está condenado a ser derrumbado por la fuerza del movimiento popular. Ese será su derrotero final, tal como avizorábamos después de la segunda vuelta del 2006, que el triunfo de García Pérez no abre un proceso democrático sino que crea las condiciones para un proceso revolucionario genuinamente peruana
Pero mientras dura la convulsión y la protesta social, por un lado, es necesario que el movimiento popular debe hacer una retirada táctica y estrategia, pues hay un problema fundamental que tiene que superarse, la unidad en la protesta y la movilización ha sido un éxito, pero afronta una debilidad, la falta de unidad en el liderazgo y la organización es evidente. Aun existen viejos lideres de estirpe caudillesco que aspiran recuperar terrenos perdidos con apetitos de siempre, protagonismos y celos agotados y superados por la historia, algo que el movimiento popular demanda con urgencia nuevos cuadros y dirigentes leales a la voluntad popular, una nueva generación con nuevos bríos, una nueva sangre nutrida en la experiencia y la juventud, en el combate y la consecuencia.
El 05, 06, 11, 12, 13, 14 de julio y de las jornadas siguientes serán históricos, porque marcan la antesala de la derrota de la dictadura, un gran ensayo general del movimiento para medir las fuerzas y la capacidad de despliegue, lo fundamental es el aprendizaje y la acumulación. Retirada para volver con la misma tenacidad, con mayor fuerza, un paso atrás para dar dos pasos adelante, hacia la victoria, hacia el triunfo. Se ha abierto el camino a una revolución nacionalista, el camino de la liberación nacional y la instauración de una nueva republica, de una patria para todos. De esta perspectiva ¡Bienvenidos el FRENTE NACIONAL de todo el pueblo!
El resultado, más de 20 muertos (como resultado de la represión directa e indirecta), centenares de detenidos de manera arbitraria y otra cantidad de heridos, una represión indiscriminada de las fuerzas alanistas contra todo el pueblo peruano, que tras 11 meses de gestión autoritaria y show mediático y campañas sicosociales, le supo decir ¡Basta! al continuismo neoliberal.
Por otro lado se ha inaugurado un régimen fascista dictatorial (dirán acaso los conocedores de teoría política que no es dictadura, sin entender que la dictadura de nuestros tiempos ya no es la repetición de las viejas dictaduras pero tiene la misma esencia: defender un orden social de opresión oligárquico) por cuanto cumple todos los requisitos: régimen autoritario, control absoluto de los medios de comunicación o alineación con el régimen fascista (quienes en sus noticieros y titulares rinden culto a la represión y los celebran); control sicosocial de la población, campañas contra la oposición y persecución, criminalizacion de toda protesta popular (categorización de terrorismo y delincuentes) y procesos sumarios que se han empezado en forma masiva contra los maestros huelguistas, finalmente gobierna con decretos leyes de urgencia y la negativa petulante de no negociar con quienes piden dialogo y se manda a las fuerzas armadas y policiales a su represión total con muertos heridos.
Hechos contundentes que muestras su esencia fascista son los hechos ocurridos del 5, 6, 11, 12, 13 y 14 de julio y los días siguientes como Andahuaylas y Arequipa, una represión violenta sin limites (recuérdese la marcha de los 4 suyos), pero también en su arrogancia muestra su debilidad y enfrentar pueblo contra pueblo, como lo de Trujillo en la mañana del viernes 13, movilización de “padres de familia” apristas (uso del nombre de APAFAs) contra los docentes, mítines mediáticos –, él y su pandilla si pueden hacer mítines sin permiso a su favor pero cuando es contra suya se le detiene, se les persigue, se le lanza bombas ¿no es un régimen fascista acaso?–.
Por otro lado, es a todas luces, que el movimiento popular esta en ascenso mientras el alanismo en declive, por ello le es necesario la mayor fascistizacion del estado peruano que conducen a la dictadura, no obstante empieza la cuenta regresiva de su inevitable derrota, pues los hechos muestra palmariamente que el pueblo no esperara el 2011 ni otros 4 años por lo que el régimen fascista de García Pérez está condenado a ser derrumbado por la fuerza del movimiento popular. Ese será su derrotero final, tal como avizorábamos después de la segunda vuelta del 2006, que el triunfo de García Pérez no abre un proceso democrático sino que crea las condiciones para un proceso revolucionario genuinamente peruana
Pero mientras dura la convulsión y la protesta social, por un lado, es necesario que el movimiento popular debe hacer una retirada táctica y estrategia, pues hay un problema fundamental que tiene que superarse, la unidad en la protesta y la movilización ha sido un éxito, pero afronta una debilidad, la falta de unidad en el liderazgo y la organización es evidente. Aun existen viejos lideres de estirpe caudillesco que aspiran recuperar terrenos perdidos con apetitos de siempre, protagonismos y celos agotados y superados por la historia, algo que el movimiento popular demanda con urgencia nuevos cuadros y dirigentes leales a la voluntad popular, una nueva generación con nuevos bríos, una nueva sangre nutrida en la experiencia y la juventud, en el combate y la consecuencia.
El 05, 06, 11, 12, 13, 14 de julio y de las jornadas siguientes serán históricos, porque marcan la antesala de la derrota de la dictadura, un gran ensayo general del movimiento para medir las fuerzas y la capacidad de despliegue, lo fundamental es el aprendizaje y la acumulación. Retirada para volver con la misma tenacidad, con mayor fuerza, un paso atrás para dar dos pasos adelante, hacia la victoria, hacia el triunfo. Se ha abierto el camino a una revolución nacionalista, el camino de la liberación nacional y la instauración de una nueva republica, de una patria para todos. De esta perspectiva ¡Bienvenidos el FRENTE NACIONAL de todo el pueblo!
Por
Gonz’Barbarán
15 de julio 2007
15 de julio 2007
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